martes, 5 de enero de 2010

LOS REYES MAGOS

Traigo una historia del blog de "Iluscave,historias,humor y amor" y que espero que les guste.

Apenas su padre se había sentado, al llegar a casa, dispuesto a escuchar como todos los días lo que su hija le contaba de sus actividades en el colegio, cuando ésta, en voz baja, como con miedo, le dijo:«¿Papá?»-Sí, hija,cuéntame.-«Oye, quiero... que me digas la verdad».-Claro, hija.Siempre te la digo,respondió el padre un poco sorprendido.-«Es que...»,titubeó Cristina.-Dime, hija,dime.-«Papá,¿existen los Reyes Magos?»El padre de Cristina se quedó mudo, miró a su mujer, intentando descubrir el origen de aquella pregunta, pero sólo pudo ver un rostro tan sorprendido como el suyo que le miraba igualmente.-«Las niñas dicen que son los padres.¿Es verdad?»La nueva pregunta de Cristina le obligó a volver la mirada hacia la niña,y tragando saliva le dijo:-¿Y tú qué crees,hija?-«Yo no sé, papá:que sí y que no. Por un lado,me parece que sí que existen porque tú no me engañas;pero,como las niñas dicen eso».-Mira,hija,efectivamente son los padres los que ponen los regalos pero...-«Entonces es verdad? -cortó la niña con los ojos humedecidos-.¡Me habéis engañado!»-No,mira,nunca te hemos engañado,porque los Reyes Magos sí que existen,respondió el padre cogiendo con sus dos manos la cara de Cristina.-«Entonces no lo entiendo,papá».-Siéntate,cariño,y escucha esta historia que te voy a contar,porque ya ha llegado la hora de que puedas comprenderla,dijo el padre,mientras señalaba con la mano el asiento a su lado.Cristina se sentó entre sus padres,ansiosa de escuchar cualquier cosa que le sacase de su duda y su padre se dispuso a narrar lo que para él debió de ser la verdadera historia de los Reyes Magos:-Cuando el Niño Dios nació,tres Reyes que venían de Oriente,guiados por una gran estrella,se acercaron al Portal para adorarlo.Le llevaron regalos en prueba de amor y respeto y el Niño se puso tan contento y parecía tan feliz que el más anciano de los Reyes,Melchor,dijo:"¡Es maravilloso ver tan feliz a un niño!Deberíamos llevar regalos a todos los niños del mundo y ver lo felices que serían"."¡Oh, sí!-exclamó Gaspar-.Es una buena idea,pero es muy difícil de hacer.No seremos capaces de poder llevar regalos a tantos millones de niños como hay en el mundo".Baltasar,el tercero de los Reyes,que estaba escuchando a sus dos compañeros con cara de alegría,comentó:"Es verdad que sería fantástico,pero Gaspar tiene razón y,aunque somos magos,ya somos ancianos y nos resultaría muy difícil recorrer el mundo entero entregando regalos a todos los niños.Pero sería tan bonito..."Los tres Reyes se pusieron muy tristes al pensar que no podrían realizar su deseo.Y el Niño Jesús,que desde su pobre cunita parecía escucharles muy atento,sonrió y la voz de Dios se escuchó en el Portal:"Sois muy buenos,queridos Reyes,y os agradezco vuestros regalos.Voy a ayudaros a realizar vuestro hermoso deseo.Decidme:¿qué necesitáis para poder llevar regalos a todos los niños?""¡Oh,Señor!-dijeron los tres Reyes postrándose de rodillas-.Necesitaríamos millones y millones de pajes,casi uno para cada niño que pudieran llevar al mismo tiempo a cada casa nuestros regalos,pero no podemos tener tantos pajes,no existen tantos"."No os preocupéis por eso-dijo Dios-.Yo os voy a dar,no uno,sino dos pajes para cada niño que hay en el mundo"."¡Sería fantástico!Pero,¿cómo es posible?",dijeron a la vez los tres Reyes con cara de sorpresa y admiración."Decidme,¿no es verdad que los pajes que os gustaría tener deben querer mucho a los niños y conocer muy bien sus deseos?",preguntó Dios."Sí,claro,eso es fundamental",asistieron los tres Reyes."Pues decidme,queridos Reyes:¿hay alguien que quiera más a los niños y los conozca mejor que sus propios padres?"Los tres Reyes se miraron asintiendo y empezando a comprender lo que Dios estaba planeando,cuando la voz de nuevo se volvió a oír:"Puesto que así lo habéis querido y para que, en nombre de los tres Reyes de Oriente todos los niños del mundo reciban algunos regalos,Yo ordeno que,en Navidad, conmemorando estos momentos, todos los padres se conviertan en vuestros pajes,y que en vuestro nombre,y de vuestra parte,regalen a sus hijos los regalos que deseen.También ordeno que,mientras los niños sean pequeños,la entrega de regalos se haga como si la hicieran los propios Reyes Magos.Pero cuando los niños sean suficientemente mayores para entender esto,los padres les contarán esta historia y, a partir de entonces,en todas las Navidades,los niños harán también regalos a sus padres en prueba de cariño.Y,alrededor del belén,recordarán que,gracias a los tres Reyes Magos todos son más felices".Cuando el padre de Cristina hubo terminado de contar esta historia,la niña se levantó y dando un beso a sus padres dijo:-«Ahora sí que lo entiendo todo,papá.Y estoy muy contenta de saber que me queréis y que no me habéis engañado».Y corriendo,se dirigió a su cuarto,regresando con su hucha en la mano,mientras decía:-«No sé si tendré bastante para compraros algún regalo,pero para el año que viene ya guardaré más dinero» y todos se abrazaron,mientras, a buen seguro,desde el Cielo, tres Reyes Magos contemplaban la escena tremendamente satisfechos

APRENDI

Al primer año de nacido aprendí lo importante que es un juguete,sobre todo si sabe rico.A los 2 años, aprendí que caerse duele.A los 3 años, aprendí que duele más una palabra que un golpe.A los 4 años aprendí lo interesante que puede ser un rompecabezas.A los 5 años, aprendí que a los pececitos dorados no les gustaba la gelatina...A los 6 años, aprendí que bañar a las tortugas con agua caliente las mata aunque huelan feo.A los 7 años, aprendí lo confortante que se siente un abrazo de papá o mamá cuando me daba miedo o simplemente cuando sentía que necesitaba sentirme amado.A los 8 años, aprendí que no todo se puede arreglar con un berrinche.A los 9 años, aprendí que mi profesora sólo me preguntaba cuando yo no sabía la respuesta.A los 10 años, aprendí que era posible estar enamorado de cuatro chicas al mismo tiempo.A los 12 años, aprendí que, si tenía problemas en la escuela, los tenía más grandes en casaA los 13 años, aprendí que, cuando mi cuarto quedaba del modo que yo quería, mi madre me mandaba a ordenarloA los 15 años, aprendí que no debía descargar mis frustraciones en mi hermano, porque mi padre tenía frustraciones mayores... y la mano más pesada.A los 16 años, aprendí que mi hermana no era mi mayor enemiga y que podía ser mi mejor confidente.A los 17 años, aprendí que emborracharte no siempre es el mejor sentimiento, (menos al otro día) y que no es la mejor forma de solucionar los problemas.A los 18 años, aprendí que no valía la pena discutir con mi madre.A los 19 años aprendí lo que duele dejar a alguien que amas.A los 20 años, aprendí que los grandes problemas siempre empiezan pequeños.A los 21 años, aprendí que un libro puede llegar a ser una buena compañía.A los 22 años, aprendí que si encuentras a la mujer adecuada te puede enseñar a amar.A los 23 años, aprendí lo que es extrañar a alguien y lo grato que es volverlo a encontrar.A los 24 años, aprendí que con el tiempo las cosas se miran de una forma diferente.A los 25 años, aprendí que aunque me quería comer el mundo aun me faltaba mucha experiencia.A los 26 años, aprendí que no importa lo lejos que viajes cuando quieras huir de algo, tus problemas siempre te acompañaran a lo largo de toda la travesía.A los 27 años, aprendí que él titulo obtenido no era la meta soñada.A los 28 años, aprendí que se puede hacer, en un instante, algo que te va a hacer doler la cabeza la vida entera.A los 30 años, aprendí que se necesita mucho amor, paciencia e inteligencia para vivir con alguien.A los 31 años, aprendí lo que es ser padre y me empecé a dar cuenta de lo que eso significa.A los 32 años, me di cuenta lo que me falto conversar y convivir con mi padre y lo mucho que me falto aprender de el.A los 33 años, aprendí que a las mujeres les gusta recibir flores, especialmente sin ningún motivo.A los 34 años, aprendí que no se cometen muchos errores con la boca cerrada.A los 35 años, aprendí que puedes deprimirte como cuando tenias 17 años y eso no esta mal, solo significa que estas empezando a pensar en ti mismo.A los 36 años, entendí que mi madre no va cambiar y sigue siendo inútil discutir con ella.A los 37 años, comprendí lo lejos que estaba de saber quien era.A los 38 años, aprendí que a veces la vida se repite y duele igual que la primera vez.A los 39 años, aprendí que ser buen amigo no se trata solo de recibir.A los 40 años, aprendí que, si estás llevando una vida sin fracasos, no estás corriendo los suficientes riesgos.Luego, al pasar de los años aprendí.Que puedes hacer a alguien disfrutar el día con solo con un pequeño detalle que casi siempre no cuesta nada.Que niños y abuelos son aliados naturales.Que ver una buena película puede darme una tarde agradable.Que aprender a aceptarme como soy me puede ayudar a no sentirme tan solo.Que es absolutamente imposible tomar vacaciones sin engordar cinco kilos.Que no puedo cambiar lo que pasó pero puedo dejarlo atrás.Que las cosas que te pasan y que te duelen siempre te dejan una enseñanza. y esta en ti aprender de ella.Que nunca es tarde para decir lo siento y perdón.Que puede doler pero sé que después me voy a sentir mejor.Que nunca es tarde para decir la verdad (por mas dura que esta sea) y que tampoco es tarde para enfrentar a quien le hice daño si aquélla persona te quiere te sabrá entender y perdonar.Que pedir ayuda puede dar mucha vergüenza y miedo, pero que a veces es necesario y hay que sacar fuerzas y valor para hacerlo.Que la mayoría de las cosas por las cuales me he preocupado nunca suceden.Que esperar a los hijos despierto cuando salen de noche no va a hacer que lleguen mas temprano.Que si esperas a jubilarte para disfrutar de la vida, esperaste demasiado tiempo.Que nunca se debe ir a la cama sin resolver una pelea.Que me hubiera gustado tener la experiencia que tengo ahora cuando era mas joven, seguramente no habría dejado pasar muchas oportunidades.Y que ahora entiendo que eso es imposible y que solo me queda aplicar mis experiencias y no perder la oportunidad de encontrar a un amigo.Que si las cosas van mal, yo no tengo por qué ir con ellas.Aprendí que envejecer es importante.Aprendí que amé menos de lo que hubiera debido.Y hoy... me doy cuenta que todavía;Que tengo mucho para aprender. y que no importa la edad que tengas, aun estás a tiempo de cambiar las cosas y ser feliz